Este restaurante ubicado en una de las calles más destacadas por su arquitectura del Centro Histórico, lleva el mismo nombre de su ubicación; Nueva York 29.
Es un ambiente donde los visitantes pueden degustar una cocina criolla chilena e internacional, resaltando un delicado emplatado en las preparaciones con sello de cocina de autor.
Sus amplios espacios en el segundo piso, se encuentran cálidamente ornamentado con murales fotográficos de los años 30, como un viaje al pasado que invita a los comensales a disfrutar un grato café de tono artesanal durante la mañana; o un variado y sabroso menú del día, a la hora de almuerzo.
Entre sus especialidades se destacan las carnes preparadas a la cacerola, las pastas en su punto y los mariscos frescos, todo acompañado de un buen vino de viñas chilenas de autor.