Reseña
Es el edificio donde actualmente funciona el Arzobispado de Santiago. El terreno corresponde a los solares que el conquistador Pedro de Valdivia asignó a la Iglesia durante el proceso de fundación de la ciudad.
En 1850, cuando Santiago había sido elevada al rango de Arzobispado, se inició la construcción del Palacio Arzobispal, como una manera de mejorar la precariedad en que se encontraba el edificio anterior.
Fue declarado Monumento Nacional en 1975.
Historia
Al hacer la distribución de la ciudad, el conquistador Pedro de Valdivia asignó a la Iglesia los solares situados en el costado poniente de la Plaza de Armas. En uno de ellos fue edificada la primera casa parroquial.
Sin embargo, esa construcción duró hasta que las huestes de Michimalonco la destruyeron en su asalto a Santiago. La segunda casa fue levantada en 1542. Diecinueve años más tarde, al fundarse el Obispado de Santiago, fue construida una casa de dos pisos enfrentando la plaza.
Hacia 1850, cuando ya la ciudad había sido elevada al rango de Arzobispado, la Catedral y la Capilla del Sagrario tenían su frontis ya establecidos. Sólo el Palacio Arzobispal y sus tiendas presentaban un aspecto ruinoso que deterioraba el aspecto general de la plaza, situación que motivó la construcción de un nuevo edificio.
La obra fue iniciada en 1852, pero debió enfrentar acontecimientos que retrasaron su término, como la muerte del arquitecto a cargo, Brunet de Baines, y dificultades en el financiamiento. Los trabajos se paralizaron hasta que en 1869 se encargó al arquitecto francés Luciano Henault su finalización.
Arquitectura
El palacio posee acentuados rasgos neoclásicos: tiene un volumen de edificación continua de tres pisos y al interior existe un patio interior rectangular.
El primer nivel de dos fachadas está reservado a locales comerciales y en el segundo nivel resaltan pilastras pareadas de capitel dórico y corintio, además de columnas que recorren la fachada.
Compañía de Jesús, Santiago.