Es uno de los teatros más grandes de Santiago. Fue inaugurado en marzo de 1954 con la obra “Qué vergüenza para la familia” y, desde entonces, en su escenario se han montado piezas como “La pérgola de las flores”; “Madama Butterfly” y exitosas zarzuelas, operetas y revistas.
Carlos Cariola, destacado dramaturgo, motivado por la idea de construir un espacio para los artistas de la capital, adquirió los terrenos de San Diego a mitad del siglo XX.
Para financiar la construcción, los artistas salieron a la calle a pedir donaciones. El Gobierno, la Municipalidad de Santiago, empresarios, comerciantes y vecinos realizaron los aportes.
Con los elementos usados para alhajar el teatro ocurrió algo similar y cada butaca tiene una placa con el nombre de quien la donó.
Gracias a toda esa gestión, se levantó un edificio de cinco pisos que alberga dos salas: la sala Carlos Cariola equipada con 1.100 butacas, y otra más pequeña, de 150 asientos, que lleva el nombre del actor Alejandro Flores.
En el escenario también se han realizado presentaciones de artistas nacionales, como del grupo Los Prisioneros e Inti-Illimani.
San Diego, 236, Santiago.